Posiblemente, los españoles nunca llegaremos a agradecer suficientemente, cuantos algunos grandes hombres hicieron en bien por este país al inicio de la democracia.
Sin duda, el Rey Juan Carlos, los padres de la constitución y otros, realizaron una importante misión después de 40 años de dictadura. Otros en cambio, han quedado en el olvido general, salvo en la memoria de su entorno. Fueron buenas personas y grandes profesionales, aunque uno de ellos, a fuerza de tentarlo salió al final de su carrera y vida en desgracia.
Fueron los verdaderos arquitectos y artífices de la solidez que disfrutamos en España a nivel bancario y fiscal, de la que, los actuales dirigentes bancarios presumen sin mérito propio en cuanto a la esencia.
José Ramón Álvarez Rendueles y Mariano Rubio Jiménez como Gobernadores del Banco de España y Francisco Fernández Ordoñez, como ministro de Hacienda, entre otros, desde el año 1978, rediseñaros y sentaron las bases modernas de las normativas de control de la banca y fiscal que facilitaron el buen comportamiento de la banca en general.
Gracias a ellos hasta hoy, ha permitido dar cierta robustez y confianza en el sistema financiero y fiscal. Actualmente, no parece que estemos a salvo, pues las sinergias y concurrencia de deterioro de la crisis y los pecados cometidos por el sistema no perdonan. El trabajo bien realizado, solo sirve para ser de los últimos en caer ante los graves errores de principio e inicio. En todo caso, realizaron una gran labor y aquí mi modesto reconocimiento.
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